domingo, 14 de julio de 2013

DIOS HABLA

Dios Dijo:
Hoy te sentarás y serás receptivo y aprenderás.
Hoy te dejarás a un lado y Me escucharás.
Ya no necesitas de tus agendas.
Naciste encariñado con tu madre para que pudieras alejarte y conocer tu Unicidad Conmigo. No tienes que ir a ninguna parte. No tienes que distanciarte. Te separas para aprender que no hay separación. Solamente, estás encariñado con la separación.
Le has tenido cariño a tu individualidad, y ahora abrirás camino para Mí.
Eres un recipiente puro de Mi amor.
Los recipientes son envases. Un recipiente recibe y contiene, no para conservar, sino para ser vaciado.
Como recipiente de Mi amor, tú me viertes. No tienes que hacer mucho. Sólo tienes que agacharte un poquito, inclinarte un poquito, y Mi amor fluirá.
Sí, serás un recipiente puro de Mi amor.
Pureza no significa lo que tú crees que significa. No significa que eres perfecto ante los ojos del mundo, que comes comidas perfectas, que te comportas perfectamente. Tú no puedes decir de ti que te comportas perfectamente, porque la individualidad con la que te has encariñado sabe muy poco y entiende incluso menos.
Hoy irás hacia lo alto. Dejarás atrás tu pasado. Ya no dependerás de tu pasado. Estás abriendo camino para Mí, y para hacerlo, tú (eso que imaginas que eres) debes apartarte del camino.
Eso es todo lo que tienes que hacer. Luego Me permitirás pasar.
El recipiente piensa que es dueño de lo contenido. Pero un recipiente no es dueño. Es un transportador. Contiene para transportar. Lo contenido no es para él. Un recipiente está preparado, listo para entregar lo que ha conservado. El recipiente no se aferra sino que se desprende.
Soy Pureza.
Y tú te conviertes en la pureza del amor que debes ser al olvidarte del sentimiento personal de posesión. La individualidad que tanto aprecias te reprime. Piensas que es lo que te hace importante, pero es tus tribulaciones. Piensas que es la entrada, pero está alojada en ti por cariño.
Lo personal no quiere cambiar. Podría decir que sí quiere. Quizás quiere que cambie aquello que le rodea como le plazca, pero realmente quiere conservarse tal como ya es, o piensa que ya es. Quiere capturar al mundo para sí en lugar de abrirse al mundo.
Basta de esperar.
En cambio, permíteme entrar y dar el amor que has estado almacenando por Mí.
Hoy apártate de tu camino.
No eres el tema central.
Yo soy el tema central.
El mundo de la vida es Mío.
Tú has flanqueado al mundo.
Ahora te digo que entres en él.
Y entra en él como venías.
Venías sin nada excepto por Mí. Venías con Mi fe en ti. Ahora conoces tu fe en Mí. Sé inocente.
No venías con valijas. No te aprovechaste. Tenías las manos abiertas, y por lo tanto, tenías todo para dar.
Todavía contienes todo. Todo está contenido dentro de ti. Pero miras hacia afuera para llenarte. Ya estás lleno. Me tienes a Mí dentro de ti. Entérate. Deja que Mis pensamientos sean tuyos.
Hoy despiértate a tu santidad.
La pobreza espiritual es una pretensión.
No es la verdad.
Hoy estás aprendiendo lo que significa la frase "Hágase tu voluntad".
Actualmente escarbas la tierra con los dedos, y todo el tiempo hay un Transportista enorme a tu disposición. Rastrillas con un palito cuando sólo tienes que pedirme que abra la Tierra. Dibujas fantasías con tu palito, y te quejas por lo que has fantaseado y lo cuestionas y te preocupas por cada dirección y pides todas las descripciones y análisis para que se cumpla tu voluntad, y, todo el tiempo tu voluntad es un pequeño palito.
Únete a Mi voluntad y ven desde un lugar más elevado y amplio de Verdad y amor grandiosos. ¿Realmente piensas que lo finito puede superar a lo Infinito? No te encariñes con tu pequeño mundo. Ábrete al Mío. Ábrete al cielo, pues lo he vertido dentro de ti.
Traducido por: Cecilia R